DÉJATE LLEVAR

Dejarte llevar es fundamental a la hora de pintar y reflejar tus emociones. Nunca vas a poder pintar dos veces de la misma manera ya que nos guiamos por nuestros sentimientos y experiencias, por lo que dependemos de cada momento y de cada sensación.

Esto es algo muy curioso, pero aún más es darse cuenta que el cambiar la forma habitual de pintar puede provocar un cambio y una influencia brutal a la hora de dejar fluir nuestras emociones, y cómo he dicho al principio, dejarnos llevar y dejarnos fluir.

Todo esto lo hemos experimentado a través de una actividad.

Para poder realizarla hemos pintada con todo tipo de pinturas en un gran papel blanco, dibujando lo que cada uno quisiera, sin ninguna regla ni condición.

La práctica ha sido dividida en varias partes:

En primer lugar, hemos pintado libremente sin ningún impedimento, pudiendo hablar con nuestras compañeras y pudiendo utilizar todos los tipos de pinturas y colores que quisiéramos.

En segundo lugar, hemos pintado de la misma manera pero cada uno de una forma aislada, con música. Esto nos permite desconectar y asilarnos del resto interiorizando nuestras sensaciones y pudiéndolas plasmar de una forma más clara.

El tercer dibujo ha consistido en taparnos los ojos con un pañuelo y dejar libre la imaginación. Este trabajo resultó algo complicado ya que no sabes si los trazos que estás imaginando los estás plasmando correctamente en el papel, o por el contrario, no están cobrando sentido. Pero ésta es la gracia de la actividad.

Sin embargo, he de decir que no nos salió muy mal ya que se podía ver los dibujos que cada una quería reflejar, aunque hubiera algunos fallos o alguno de los dibujos estuviera descentrado.

Después realizamos lo mismo pero ésta vez oyendo música de nuevo. Esto nos ha permitido concentrarnos más, lo que ha ayudado a que saliera mejor y con algo más de precisión.

El quinto dibujo parecía que iba a ser algo bastante complicado ya que consistía en atarnos la mano con la que escribimos con nuestro compañero y dejar libre para dibujar la otra. Pero nos llevamos una grata sorpresa ya que aunque era algo costoso, porque no teníamos la destreza suficiente, salieron bastante bien todos los dibujos.

Y el último dibujo era igual que el anterior pero, de nuevo, escuchando música.

La conclusión que hemos podido sacar de esta actividad es que podemos dejar sacar nuestros sentimientos y plasmarlas en un papel de una manera mucho más destacable si nos aislamos en nuestro propio mundo sin que nadie nos moleste. Además cuando escuchamos música, creamos en nuestro interior nuevas emociones o recordamos ciertas experiencias que nos han ocurrido en nuestra vida y por alguna razón asociamos con esa canción. Todo ello hace que dibujemos cosas distintas y las que de alguna manera podemos relacionar o sacarle algún sentido cercano a la canción. Pero aun así, aunque dos personas escuchen la misma canción van a dibujar cosas totalmente distintas que posiblemente la otra persona no le encuentre sentido, y viceversa. Pero como he dicho antes, cada uno relaciona una canción con sus propias experiencias personales y cada dibujo plasma unas emociones únicas aunque a simple vista no las podamos descifrar; y eso es algo mágico.

Por último me gustaría reflexionar acerca del corte de alas que se nos realiza cuando empezamos a ser mayores, relacionado con la pintura.

Cuando somos pequeños dejamos libremente fluir nuestra imaginación sin miedo a que alguien no le guste nuestro dibujo o no esté correcto. Sin embargo, cuando entramos en el colegio, empezamos a someternos a la perfección y a los castigos cuando algo está mal, por lo que nos empieza a dar miedo equivocarnos o salirnos de los límites establecidos y normalizados. El hecho de que constantemente te estén juzgando y criticando por lo que haces o dejas de hacer acaba creando una frustración en las personas que desemboca en el dejar de pintar, por miedo a hacerlo mal. Y esto es un grave error, porque no sólo estamos cortando el desarrollo de la imaginación que tenemos en nuestro interior sino que nos estamos influenciando por las opiniones de los demás y estamos dejando de hacer algo que nos gusta e incluso nos permita expresarnos libremente y deja que expresemos nuestras emociones de una manera especial.

Por lo tanto, deberíamos concienciarnos y poner nuestro granito de arena para así conseguir que la imaginación y la creatividad sea algo esencial en nuestra vida; algo que nunca debemos cortar ni criticar, ya que posiblemente estemos impidiendo que grandes genios salgan a la luz, y realmente, esto es algo triste.