En primer lugar me gustaría plasmar algunas de las nociones
que hemos aprendido en clase y nos serán muy útil el día de mañana para saber
interpretar los dibujos que realicen los niños.
Los niños de 5 años se encuentran en la etapa preesquemática.
Empieza a ser la etapa del simbolismo. En esta edad el dibujo infantil está
cargado de imágenes simbólicas (5-6 años). No tiene nada que ver con el
realismo cómo lo entendemos.
Los niños expresan notablemente sus emociones y las plasman
en sus dibujos. Además dibujan sobre la experiencia, es decir, sus dibujos
siempre van a estar relacionados con alguna vivencia personal suya propia.
En esta edad se empieza a tener conciencia de la identidad
propia por lo que es muy frecuente que aparezcan sus nombres o los d sus
familiares en sus dibujos ya que dan mucha importancia a los nombres, y además
las letras funcionan como dibujo.
Para observar estas características en un dibujo real, hemos
analizado el dibujo de Sandro, el hermano de Celia.
En el dibujo se han utilizado únicamente dos colores, uno
para las letras y otro para la imagen. Es curioso que estos dos colores son
complementarios por lo que se potencin mucho, tienen mucha fuerza cuando se
emplean juntos.
Es un dibujo de línea donde las letras y el dibujo son igual
de importante, lo que se puede ver reflejado en el tamaño.
Como bien hemos dicho, en esta etapa los niños son muy
emocionales en sus dibujos y esto se puede ver en la importancia que le da a la
sonrisa del rinoceronte.
Si nos fijamos en la disposición del dibujo podemos observar
que construye el espacio con zonas animadas, ruido y con vacíos, silencio. Lo
realiza en una forma mandálica creando una imagen equilibrada.
El silencio de la parte de abajo se compensa con el lleno de
arriba (dentro del círculo). Esto crea un buen equilibrio.
Lo único que podemos encontrar es que falta algo abajo al
lado del nombre de Sandro que produce un desequilibrio, un silencio que no se
ve donde se compensa.
Hemos llegado a la hipótesis de que posiblemente quisiera
escribir el apelllido de la madre, pero quizás no se ha decidido a hacerlo ya
que sus padres están separados y puede que tenga alguna confusión al respecto.
Después hemos analizado un dibujo de una niña de 8 años.
En esta edad los niños ya empiezan a entrar en la edad de la
razón y a su vez en la etapa esquemática, pero no llega a ser realismo.
La edad de la razón coincide a los 9 años donde los dibujos
se convierten más estereotipados y mucho más rígido por lo general, ya que
tampoco se les anima a dibujar tanto y se les obliga a copiar algo o a hacerlo
correcto.
Además se puede distinguir claramente los dibujos de niños y
de niñas ya que las niñas suelen ser más decorativas, usan mucho más color y
suelen ser dibujos más relacionados con las emociones. No quiere decir que sean
más alegres, sino que intentan más agradar, y esto es algo que viene de la
tradición femenina. A su vez se suelen fijar mucho más que los niños en los
detalles del cuerpo, en la figura, en la postura, en los rasgos más insignificantes
(como las pestañas…)
Los niños comprendidos en este período suelen tener
tendencia a dibujar sangre, violencia, acción sangrienta… relacionándolo con el
contacto diario que tienen con los videojuegos e incluso con los medios de
comunicación.
No tengo dibujo de esta niña pero aparecía una flor bastante
grande en el centro y al lado una niña en posición de sirena mirando a la flor.
Encima se encontraba el sol y una nube en cada una de las esquinas del folio.
Es curioso que la niña había feminizado la nube poniéndole labios y pestañas, y
masculinizado al sol. Hemos llegado a la conclusión de que la niña escogió esos
aspectos por ser EL sol y LA nube.
Ya utiliza ya la línea de tierra claramente.
Creemos que la niña se pinta
a sí misma ya que se dibuja un lunar que tiene situado al lado del ojo
derecho y pecas. El pelo también se lo dibuja igual que el suyo.
Después vimos más dibujos de la misma niña y siempre sale la
misma niña en sus dibujos, con los mismos rasgos, por lo que decimos que se
dibuja a sí misma.
Por último me gustaría dejar los dibujos de mis primos.
Hugo, 3 años.
Su familia.
Un árbol de navidad.
Daniel, 5 años.
Dibuja a su familia también.
Me gustaría que analizáramos este dibujo ya que es un niño
muy sensible, muy sensato y razonable. Se fija mucho en los detalles y le gusta
realizar las tareas con la máxima perfección y precisión posible.
Es peculiar porque los niños no suelen ser tan detallistas
ni precisos, y sin embargo él sí.
Y para que todos reflexionéis un poco, me gustaría dejar
plasmado lo que nos dijo la profesora. “Una línea es un concepto abstracto. No
hay líneas, son planos de color.
La realidad es la luz y la construimos nosotros mismos.”
Es complicado de entender pero sí paras a pensarlo te das
cuenta de que es cierto, y qué hasta día de hoy hemos estado creyendo en algo
falso.
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